Canta el ruiseñor de la mañana,
La dulce princesa percibe el sonido,
Pero sigue durmiendo,
No quiere enfrentarse a la luz del día,
No quiere pertenecer a la vida real.
Su imaginación es poderosa,
Todo lo que se imagina,
Es capaz de sentirlo de verdad,
Como si estuviera sucediendo,
En el momento.
Se imaginó en una isla,
En una isla desierta,
En donde solo estuviera ella,
Y las personalidades inventadas por su mente.
La gente le decía,
Que estaba loca,
Ella simplemente decía,
Que esas personalidades,
Las creaba,
Porque se sentía SOLA.