Por el rabillo del ojo te veo sin
pestañar,
aún estás a un lado de la habitación
y mi corazón palpita,
más no puedo tocarte, ya has puesto
tierra en medio entre tú y yo,
mis manos tiemblan como si llegara el
otoño,
mis ojos miran a un futuro que ya se
acabó,
que se desmorona como los castillos de
arena en la playa,
como el hielo en clima de verano...
Aún tienes tus ojos de temor,
esos mismos que han hecho que todo se
acabara entre tú y yo.
Nota: He estado demasiado perdida por acá... Prometo volver.
2 comentarios:
Vuélvete, entre vueltas y vueltas, pero vuelve.
Cuanto tiempo sin visitarte... y cuando regreso descubro que ya no publicas :(
Espero que estés bien. Un abrazo.
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