- ¿Quién diablos eres? ¿Por qué me persigues? – Melinda lo miró un poco inquieta, no soportaba que la miraran de esa manera, y más aún, que la persiguieran. – No me mires así.
- ¿Cómo te miro? Sólo tengo la mirada de estar viendo el paraíso. – Alexander se rió escandalosamente.- No te voy a robar, ni nada por el estilo tranquila.
- Mira.- Melinda se paró en seco, y por primera vez lo miró a los ojos.- No sé quien eres, qué haces aquí, ni de que me conoces, pero aléjate de mi de una buena vez.
- Cafetería Good monring a las 9 de la mañana. Primero dejas tu abrigo, luego te quitas tus audífonos, y te sientas. Lo haces siempre.
- ¡Eres un sicópata! – Melinda le golpeó con su bolso tantísimas veces, que Alexander intervino cogiéndole las manos. – Suéltame.
- Sólo te advierto que te voy a enamorar, de la misma forma descarada que tú me estás enamorando con esos vaqueros apretados, y tu sonrisa tierna, pero a la vez falsa.- Alexander se le acerca un poco, y le susurra al oído.- Serás mi presa.
- ¿De que diablos hablas? – Melinda se aleja de él un poco. – Además, eso de enamorar no va conmigo, no lo conseguirás, pierdes tu tiempo. – Melinda se aleja de él y sigue caminando. Se gira y lo mira con su sonrisa dulce y a la vez falsa- Por cierto, suerte con tu próxima presa.
- Esa eres tú, así que… ¡Gracias!- Alexander se quedó viendo como se alejaba y se confundía entre las personas.- Esto apenas comienza nena, apenas comienza- dijo en voz baja.
7 comentarios:
glupssss
Uy, alguien va de cacería.
No sé si me gusta mucho un chico con eros aires... lo que me encanta es la actitud de Melinda :)
Pues me ha encantado! =)
Hola! como estas?
jajaja me ha encantado esta historia ojala tenga una segunda parte!!!! la espero vale? por fiss! espero que estes bien....cuidate!
los coqueteos...
=D
me gusta tu blog ♥
Este texto me gustó de una manera especial. Vas a seguir con la historia? QUIERO LEER MAS DE ELLOS!
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